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Te presentamos cinco pasos para vivir la Pascua (del griego pascha, “tránsito”, “paso”), la cual se comprende como un tiempo de paz, alegría y esperanza. Pues el Tiempo de Pascua celebra la Resurrección del Señor.
La Pascua se vive durante los próximos cincuenta días a la Resurrección del Señor y hasta la solemnidad de Pentecostés (celebración de la venida del Espíritu Santo). La fiesta de la Pascua cristiana es la principal de la Iglesia católica. El calendario la sitúa entre el 22 de marzo y el 25 de abril. Este Tiempo de Pascua es muy propio para experimentar la alegría que nos brinda nuestro hermano Jesús.
Por eso te proponemos cinco pasos para vivir esta Pascua.
1. Participa en las celebraciones litúrgicas
Una de las mejores maneras de vivir la Pascua es participar activamente en las celebraciones litúrgicas dominicales. Estas celebraciones son un buen camino para reunirte en comunidad y compartir la vida al modo de Jesús resucitado.
2. Organiza actividades comunitarias
Considera organizar actividades comunitarias en tu colonia o parroquia para celebrar la Pascua de manera conjunta. Puedes organizar una lectura comunitaria pascual, una oración al Señor resucitado antes de alguna celebración litúrgica o de la Palabra o una convivencia después de alguna Eucaristía. Estas actividades no solo fortalecerán los lazos comunitarios, sino que también te ayudarán a vivir la Pascua de una manera más significativa y participativa.
3. Realiza obras de caridad
La Pascua es un tiempo de generosidad y servicio hacia los demás. Considera participar en obras de caridad, como visitar a los enfermos, ayudar en un comedor social, donar alimentos o ropa a familias necesitadas, o participar en proyectos de ayuda a personas sin hogar. Estas acciones te permitirán vivir el espíritu de la Pascua al servir a los más necesitados y compartir el amor de Cristo con quienes más lo necesitan.
4. Acompaña grupos de oración y reflexión
Busca grupos de oración y reflexión en tu colonia o parroquia que te ayuden a profundizar tu fe y vivir la Pascua de una manera más significativa. Puedes unirte a un grupo de lectura de la Biblia, un grupo de oración o alguno de reflexión sobre la Palabra de Dios. Estos grupos te brindarán apoyo espiritual y te ayudarán a crecer en tu relación con Jesús resucitado y con los demás.
5. Vive la alegría de la resurrección en tu vida cotidiana
Finalmente, recuerda que la Pascua es un tiempo de alegría y esperanza que debe reflejarse en tu vida cotidiana. Vive cada día con gratitud y alegría por el regalo de la vida y la salvación que nos ofrece Jesucristo. Sé testimonio vivo de la Resurrección en tu familia, en tu trabajo y en tu comunidad, compartiendo la alegría y la esperanza del Evangelio con todos los que te rodean.
En conclusión, vivir la Pascua es una oportunidad para profundizar tu fe, fortalecer los lazos comunitarios y compartir la alegría y la esperanza del Evangelio con los demás.
